Por: Natalia Acosta
-¿Cómo empezó tu
historia en este hermoso deporte?
-Desde chico que ando con la pelota en los pies y a los
nueve años me mandaron a un club del barrio que se llamaba Estrellas Rojas en
donde estuve un año. Después como me cambiaron de de escuela porque era
bastante inquieto (risas) me llevaron al colegio de Racing y en un recreo jugando con mis
compañeros un profe me vio y me propuso ir a la LIFI (liga intercolegial de
fútbol infantil) y desde ahí me llamaron para jugar para Racing. Después deje
de jugar un año y retome en Defensores
Juveniles hasta llegar a All Boys que fue mi último club antes de llegar
a Juniors.
-¿Cómo fue que
viniste a parar a Juniors?
-Me llamó el profe Sergio (Allende) yo no sabía que había ido a ver unos partidos míos y de Cachete
(Alexis Rodríguez) también. Cuando él
llegó a este club me propuso sumarme y acepté, porque para mí era dar un paso
para adelante y sentía que podía ser positivo. Cuando llegué, hace casi un año
ya, fue un paso
adelante porque yo ya sentía que en All Boys había cumplido una etapa, ya la rutina llegaba a agotar y sentía que ya
le había dado todo lo que le podía darle al club, si bien algún día quizás vuelva o no
sentía que había que cambiar de aire.
-Lo decías,
necesitabas cambiar de aire y llegaste a Juniors cuando el equipo estaba en el
Federal C y después de lo que paso llego el rearme para jugar la Liga. ¿Cómo
fue para vos adaptarte a este nuevo
club?
-Fue algo que se fue dando de una manera tranquila, si bien
me costo en un momento del año por una lesión tras otra, dos prácticamente muy
seguidas y cuando mejor me estaba acomodando. Pasar por eso por ahí me bajó un poco los ánimos en ese
momento pero con el apoyo de mi familia
fundamentalmente la seguí. Y después
poco a poco me fui sintiendo mejor y no me costó nada adaptarme a este
equipo que es muy bueno y hoy estoy muy feliz aquí.
- Las lesiones en la vida de los jugadores suele ser un golpe duro, muchos piensan en no volver mas o les lleva meses la recuperación. Para Andrés pasar por dos lesiones seguidas no fue fácil y al momento de contarlo su rostro cambió.
-Las lesiones en un
jugador de fútbol son complicadas y algunas te llevan a perder la fe y dejar
todo ¿vos como pasaste esos duros momentos?
-Confieso que en un momento pensé en dejar todo porque no
entendía porque tenía tanta mala suerte con las lesiones, fue un momento
difícil para mí. La primer lesión llegó en una práctica en un accidente con un compañero y ahí sufrí un esguince de rodilla que me
dejó casi un mes afuera. Me costó recuperarme de esa lesión y cuando estaba
volviendo de la mejor manera me jugó una mala pasada la cancha y el tobillo se
me va para afuera y de nuevo un esguince pero de tobillo, ese si fue un poco más
grave y me dejó casi mes y medio afuera. Ahí se me pasaron muchas cosas por la
cabeza, como dejar todo pero como dije la ayuda de mi familia, del doctor y de
mis compañeros fue fundamental y gracias a ellos pude levantar y volver de la
mejor manera.
-Como todo jugador que
llega a un nuevo club debes tener expectativas y objetivos por lograr ¿cuáles
son? ¿Pensas dedicarte toda tu vida al fútbol?
-Primero lograr los objetivos que nos planteamos con el
equipo a comienzo del campeonato, llegar a ese sueño. Y después sentarme a
hablar con Sergio (Allende) y mi familia para ver qué es lo mejor para mí. Si
tengo que seguir lo haré con gusto porque la verdad estoy muy feliz acá y mi
idea es esa, tratar de seguir en este club. Y si, quiero jugar al fútbol toda
la vida, eso no se negocia creo que ya para mí y para todos mis compañeros el
fútbol es un estilo de vida. Cuando hay una tarde que no se entrena por algún
motivo especial o cuando estuvo el brote de paperas las tardes se hacían
eternas y no me imagino una tarde no entrenando o jugando al fútbol, así que
siempre las mejores expectativas jugando donde me toque y si es en Juniors
mucho mejor.
-Actualmente te toca
estar en la reserva y llevar la cinta de capitán ¿Qué sentís?
-Es algo muy lindo siempre ser capitán, es una
responsabilidad. Me ha tocado serlo en la mayoría de los clubes que estuve al
menos un partido y es algo muy bueno, me gusta porque siento que es una
responsabilidad linda para mi y acompañar, ayudar y aconsejar a los chicos que
vienen a sumar desde abajo y enseñarles lo que a nosotros nos han enseñado
cuando hemos sido chicos me hace sentir bien. Estoy cómodo y me gusta porque los
chicos se sienten bien conmigo y me dicen que los ayudo bastante.
-El equipo de la
reserva está a cargo del profe Miguel Tablada ¿Como es la relación con él?
-Excelente, me dio la responsabilidad de ser capitán de la
reserva y es una muy buena relación le puedo decir lo que me parece que estamos
fallando o él me dice a mi sin ningún problema
en lo que estoy fallando yo o mis compañeros para que se lo comunique
dentro de la cancha. Es una buena relación que se formó con el correr de los
meses, es un buen profe y le estoy agradecido por la confianza.
-¿Cómo vivís el día a
día en el club?
-Bien, gracias a Dios me llevo muy bien con todos por ahí
con algunos más con otros menos pero porque es normal, pero me llevo bien con
todos que eso es lo importante. Después cuando uno se va
es bueno mantener esas buenas relaciones que armas con el correr de
los días. La verdad que la pasamos bien y es muy lindo entrenar con el equipo;
con los más chicos trato de aconsejarlos y con los más grandes ellos me
aconsejan a mí o intercambiamos opiniones acerca de los partidos, de la vida
misma. Por suerte hay buena relación con
todos, son todos unos buenos chicos.
-Sos parte del equipo
y se acercan las finales ¿Cómo manejan todo esto que están viviendo?
-Tranquilos, sabemos que tenemos que hacer lo que venimos
haciendo, no modificar nada seguir firmes porque es lo que nos trajo hasta
aquí. No hay que variar nuestro estilo de juego porque eso fue clave en
nosotros, así que hay que mantenerlo y tratar de estar lo más tranquilos
posible, tenemos compañeros que tienen mucha experiencia y saben manejar estos
momentos así que va a estar en ellos y en nosotros también en saber escucharlos
para sacar lo mejor y lograr los objetivos propuestos.
-Hablabas que la
firmeza del equipo fue una de las claves para hoy estar a un paso del objetivo
¿Qué más pensas que los diferenció del resto de los equipos de la Liga?
-El trabajo de lunes a sábado, porque es así entrenamos
prácticamente todos los días y lo hacemos con compromiso, sacrificio y mucha
humildad. Porque la mayoría de los
chicos vienen de trabajar y tienen muy poco tiempo entre lo que llegan a la
casa y salen al entrenamiento y todo eso es muy importante valorar, hay mucho
sacrificio y compromiso y por sobre todo mucho compañerismo porque a que al que
no le toca jugar lo vas a ver apoyando afuera o en el vestuario y cuando
termina el partido corren a la cancha para el abrazo final. Eso más que todo creo
que fue la clave.
-¿Como jugador como
viste y viviste este camino?
-La verdad que fue duro, primero fue duro quedar fuera del Federal porque le habíamos
apostado todas las fichas a eso, después nos costó un poquito acomodarnos en la
Liga, que era lógico porque todos estábamos abocados al Federal. En la Liga
habíamos perdido cinco partidos pero cuando se empezó a trabajar en ese
campeonato se fueron dando los resultados que hoy están a la vista de todos,
además tenemos un invicto de más de
veinte partidos y eso en la Liga hoy en día no es fácil porque cualquiera le
puede ganar a cualquiera. Se nota el trabajo que se ha realizado a lo largo de
todo estos meses y eso es muy bueno.
-¿Cómo comienza el
día para el defensor?
-Por la mañana trabajo, los chicos me cargan porque reparto
golosinas y dicen que reparto dulzura (risas) así que me cargan un poco por
eso. Estoy ahí hasta el mediodía en donde tengo la posibilidad de descansar un
ratito, cosa que otros compañeros no tienen porque directamente del trabajo se
vienen para el club, así que valoro esa posibilidad y trato de descansar un poquito
para llegar al entrenamiento.
-La vida de un
jugador no debe ser fácil ¿quiénes son
los que están ahí atrás del alambrado apoyándote cada sábado?
-Mi papá, mamá, mis
hermanos, abuelos tíos, todos. La verdad que soy un agradecido porque mi
familia está siempre y no les puedo reprochar nada. Les debo un montón de cosas
y son un apoyo constante y fiel, se que nunca me van a dejar bajar los brazos
así que el agradecimiento es eterno a ellos siempre.
-¿Admiras a algún
jugador de fútbol?
-De chiquito jugaba de cuatro y ahora estoy más de central
de cuatro o de ocho y siempre me gusto Hugo Ibarra (ex Boca Juniors) y también
me gustaba mucho Diego Lugano el central de Uruguay por la garra, por las ganas
de ir al frente siempre y me identifico con él siempre lo tuve como un espejo
para imitar su manera de jugar.
- Manzana un pibe familiero y con un amor incondicional hacia el fútbol. Disfrutó y vivió este hermoso deporte en todos los clubes que paso. Actualmente se lo ve feliz en la casa "Poeta" y con muchas ganas de triunfar y ver al club en lo más alto.



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